Por Redacción PortalCruceros
@PortalCruceros
En La Coruña se está discutiendo si la tasa turística que las autoridades locales implementarán desde 2026 también a los cruceros significarán menos recaladas en el futuro. De hecho, la Autoridad Portuaria de A Coruña solicitó oficialmente a la Xunta de Galicia que la Ley de acompañamiento a los presupuestos autonómicos de 2026 introduzca un ajuste con respecto a la de 2025, de forma que los barcos que no pernocten en la ciudad estén exentos.
La Autoridad Portuaria ya había presentado alegaciones a la ordenanza municipal, al entender que la aplicación de la tasa turística podría ser muy perjudicial para la llegada de cruceros a la ciudad, con un impacto muy negativo en la actividad económica y por tanto en el empleo. Dado que la ordenanza se basa en la ley autonómica, se considera que el ajuste propuesto en ley correspondiente a los presupuestos de 2026 dejaría también sin efecto, en la ordenanza municipal, a los cruceros que no pernocten en el puerto coruñés.
En el caso de los cruceros, la tasa turística no la abonarían los viajeros, sino la compañía naviera. Por ello, el gravamen municipal, con una tasa de USD 1,8 por pasajero y día, aunque no pernocten en la ciudad, pondría en riesgo la competitividad del puerto frente a otros destinos del entorno, además de impactar en la planificación presupuestaria de las navieras que ya están comercializando el año 2026 y 2027, y a las que la introducción de este recargo podría llevar a que busquen otros puertos de escala más competitivos.
El Ayuntamiento comenzó a aplicar la tasa a los hoteles y en general a los alojamientos turísticos, con una ordenanza que recoge su extensión a los buques de crucero a partir del 1 de enero de 2026. La decisión se sustenta en que la Ley autonómica 5/2024, de acompañamiento a los presupuestos de 2025, incluyó a los cruceros en la aplicación del gravamen, pernocten o no en la ciudad.
Para el presidente de la Autoridad Portuaria, Martín Fernández Prado, es lógico que los cruceristas abonen la tasa solo si pernoctan en la ciudad, del mismo modo que ocurre con cualquier otro viajero que llegue en avión, autobús, tren o vehículo particular a A Coruña y deje la ciudad el mismo día, sin pernoctar, y que por este motivo no abona tasa turística. Además, debe tenerse en cuenta que un porcentaje de los cruceristas ni siquiera llegan a bajar del barco.
La Autoridad Portuaria aplica un 40% de bonificación a las tasas, precisamente para incentivar la llegada de cruceros. Si se implementa la tasa turística prevista, queda sin efecto este incentivo con el que se ha logrado atraer a las compañías navieras.
Por todo ello, Fernández Prado insistió en señalar que solo se pide una igualdad de trato a los visitantes que llegan en crucero con respecto a los que lo hacen en otro medio de transporte y no pasan la noche en A Coruña.