Los cruceros emiten aproximadamente el doble de CO2 por pasajero que un avión en la misma distancia y cuatro veces más que un coche de gasolina, según se dio a conocer en una investigación publicada por Euronews.

Niels Buus Kristensen, investigador principal del Instituto de Economía del Transporte de Oslo, afirmó el hecho diciendo que “el tráfico de cruceros tiene una emisión de CO2 por pasajero significativamente mayor que si se toma el coche o el avión”.

Algunos pasajeros que llegan a Copenhague en los navíos no saben que su medio de transporte preferido emite gases contaminantes. Robert Iommazzo, un viajero estadounidense que se encuentra en una nave de la capital de Dinamarca, dijo que “pensé que estaba eligiendo un barco más respetuoso con el medio ambiente”.

Los cruceros tienen una huella de carbono mayor de lo esperado en gran parte debido a sus comodidades, las cuales funcionan esencialmente como hoteles flotantes.

Kristensen explicó que “eso es lo que debes esperar cuando viajas con tiendas, restaurantes y hoteles a bordo. Esto en sí mismo lo hace completamente diferente a si simplemente conducimos en nuestro coche o si tomamos un avión”.

Además, el investigador añadió que una transición a combustibles verdes en todo el sector del transporte podría ser la solución, incluida la industria de cruceros. Los esfuerzos significativos para reducir las emisiones de CO2 en el ámbito costero dependen de los constructores y operadores navales, y que lo que puede marcar la diferencia son iniciativas políticas que incentivarían a las empresas a adoptar prácticas más ecológicas.