Por CruisesNews Media Group
El tráfico de pasajeros de cruceros en las Islas Canarias se ha duplicado en los últimos diez años hasta superar los 2,5 millones de pasajeros en 2019.
Las Islas Canarias se organizan en dos autoridades portuarias, la de Santa Cruz de Tenerife, y la de Las Palmas.
En el caso de los Puertos de Las Palmas, han pasado de 668.500 pasajeros en el año 2010 a 1.486.118 en el 2019. Incluso durante el fatídico año 2020, Las Palmas consiguió el primer puesto en número de pasajeros de cruceros del sistema portuario español, con 517.241 pasajeros. Este hito fue debido a las grandes cifras de enero y febrero, meses en los que habitualmente lidera el ranking nacional del tráfico de pasajeros de crucero con alrededor de 200.000 pasajeros mensuales, e incluso lideró el ranking en marzo con 71.102 pasajeros, pese a la paralización de la actividad el día 14.
Con 472.859 pasajeros acumulados en marzo, volvería a la actividad en noviembre de 2020 gracias a los cruceros seguros de TUI Cruises, AIDA Cruises y Hapag Lloyd, que navegaban solo entre islas y con pasaje alemán traído expresamente en vuelos charter para el crucero. Esto le reportaría 44.382 pasajeros más.
La Autoridad Portuaria de Las Palmas gestiona las instalaciones portuarias de Las Palmas, Arrecife y Puerto del Rosario, correspondientes a las islas de Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura, las más orientales del archipiélago.
La Autoridad Portuaria ha venido efectuando ampliaciones y mejoras en todos sus puertos, como la ampliación de los muelles de Santa Catalina en el Puerto de Las Palmas, o la construcción y ampliación de muelles para cruceros tanto en el Puerto de Arrecife como en el Puerto del Rosario, hasta alcanzar un valor de 45 millones de euros en inversiones en la última década.
No obstante, todavía hay programados 15 millones de euros de inversión en la ampliación de la zona de cruceros de Naos en el Puerto de Arrecife y 2,5 millones de euros en la finalización de las ampliaciones de Santa Catalina en Las Palmas y en la ampliación del dique exterior de abrigo del Puerto del Rosario que permitirá en un futuro desdoblar el único atraque existente para el tráfico de cruceros en Fuerteventura.
Pese a todas estas inversiones en muelles y diques, necesarias sin duda ante el aumento de tráficos, en el Muelle de Santa Catalina de Las Palmas, que es el de mayor tráfico, se siguen operando los cruceros en la antigua terminal del ferris construida hace 30 años para otro propósito. Este déficit se ha venido paliando con el alquiler de carpas, pero se ha llegado a la conclusión de que las instalaciones existentes son insuficientes en capacidad y adolecen de otras prestaciones deseables en cuanto a seguridad, calidad de servicios o accesibilidad.
Por tanto, se ha decidido que se deben construir nuevas y mejores instalaciones, mediante la convocatoria de un concurso para la construcción y explotación de una nueva terminal pública de pasajeros en el Muelle de Santa Catalina, por un terminalista privado. De esta forma se solventa la insuficiencia de medios de la Autoridad Portuaria para atender de forma óptima todas las escalas de cruceros y se pone fin a un anacronismo en la moderna explotación de puerto land-lord.
