Por Redacción PortalCruceros

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Después de explorar la Polinesia Francesa a bordo del Star Breeze, los huéspedes del Windstar ahora pueden extender sus vacaciones y experimentar la belleza de Tetiaroa mientras se hospedan en The Brando, un resort ecológico de lujo en la isla privada del fallecido actor.

El paquete de dos noches está disponible para los huéspedes que reserven las Owner’s Suites del Star Breeze, así como las Broadmoor y Sea Island Suites. Se incluyen excursiones diarias, tratamientos de spa, actividades en la playa y vuelos.

Brando vio Tetiaroa mientras filmaba Mutiny on the Bounty a principios de la década de 1960. En 1967, compró el atolón con el objetivo de preservar sus aguas cerúleas y sus prístinos islotes de arrecife, también conocidos como motus.

Después de la muerte del artista en 2004, sus herederos se asociaron con la empresa hotelera Pacific Beachcomber y The Brando abrió sus puertas en 2014.

Durante la última década, el complejo ha recibido a dignatarios, celebridades, parejas de luna de miel, familias y casi todo tipo de personas. El Presidente Barack Obama pasó un mes ahí escribiendo sus memorias después de su segundo mandato en el cargo; se rumorea que otras estrellas que se han alojado en The Brando incluyen a Beyoncé y Jay-Z, Britney Spears, Kim Kardashian y Pippa Middleton.

Ubicado a unos 48 kilómetros al norte de Tahití, The Brando es un lugar remoto, y eso es una parte importante de su atractivo. Solo se puede acceder a él mediante vuelos privados ofrecidos por Air Tetiaroa, que cuenta con un cómodo salón en el Aeropuerto Internacional de Tahití Faaʻa.

La compañía cuenta con una flota de cuatro aviones pequeños con capacidad para entre seis y 15 pasajeros.

Las habitaciones de The Brando están en 35 villas privadas frente a la playa, no bungalows sobre el agua, sino alejadas, enclavadas entre árboles frondosos, lo que no solo brinda a los visitantes más privacidad, sino también acceso a su propia sección aislada de la playa.

Una cabaña de un dormitorio puede tener 93 metros cuadrados y hay de hasta 280. El lugar posee cama tamaño king y un enorme ventanal que enmarcaba el océano, un baño espacioso y un estudio. Tras las puertas corredizas de vidrio que iban del piso al techo se sale a la terraza, donde hay  una piscina privada, un comedor a la sombra, una hamaca y varias sillas.

En la playa, con muy poca gente, hay cangrejos ermitaños, charranes blancos, algunos gaviotines pardos, un gaviotín errante y una garza de arrecife del Pacífico. Remando alrededor de un pequeño arrecife de coral a solo unos metros de la orilla y se ven peces de colores, pepinos de mar y una raya águila moteada. A la distancia se avizoran ballenas.

The Brando posee un programa culinario estelar, con varios restaurantes y bares para elegir. El lugar también organiza cenas privadas, picnics en la playa y cenas románticas, así como servicio a la cabaña.

Para conocer el atolón, se puede reservar el Tetiaroa Ultimate Tour, una excursión guiada dirigida por la organización sin ánimo de lucro Tetiaroa Society, que fue establecida por la finca para proteger el atolón.

Otra opción es el Green Tour para ver de primera mano las operaciones ecológicas del complejo (The Brando fue el primer complejo del mundo en recibir la máxima distinción del US Green Building Council, LEED Platinum). Un ejemplo es el sistema de aire acondicionado de agua de mar (SWAC), que extrae agua helada de las frías y oscuras profundidades del océano para enfriar los espacios interiores de la propiedad.

El recorrido también incluyó la huerta y las colmenas de abejas de The Brando; sus sistemas de almacenamiento y tratamiento de agua; su programa de basura, reciclaje y compost; y una rápida descripción general de algunas de las investigaciones científicas que se están realizando en el atolón a través de la Sociedad Tetiaroa.

El lugar ofrece también tratamientos polinesios tradicionales en el spa Varua Te Ora, que se encuentra en el mismo hotel.