Por Redacción PortalCruceros.cl

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MSC Cruceros va a ser la primera naviera del mundo en instalar una nueva tecnología avanzada de saneamiento de aire llamada “Safe Air” para mejorar aún más la calidad y limpieza del aire a bordo para pasajeros y tripulación. ‘

El sistema se implementará en el MSC Seashore, uno de los barcos más grandes y avanzados tecnológicamente construidos hasta la fecha en Italia. La embarcación está actualmente en construcción en el astillero de Fincantieri en Monfalcone, tiene previsto ser entregado en julio de 2021 y será el primero de los dos barcos de la clase Seaside Evo.

El sistema de saneamiento de aire de nueva generación, Safe Air, basa su tecnología en lámparas de UV-C que son rayos ultravioletas de tipo C combinados con el sistema de aire acondicionado del barco, mediante el cual el flujo de aire se irradia en la fuente con una luz de longitud de onda corta que impacta partículas orgánicas y evita la circulación de contaminantes del aire como virus, bacterias y moho.

El sistema de saneamiento de aire ‘Safe Air’ ha sido creado por los técnicos y diseñadores de Fincantieri junto con el laboratorio de virología del Centro Internacional de Biotecnología e Ingeniería Genética, un instituto de investigación líder a nivel mundial con sede en Trieste, Italia. El Instituto brinda apoyo científico a las empresas para desarrollar soluciones tecnológicas innovadoras para el control de infecciones virales, lo que es particularmente relevante en la actualidad dada la actual pandemia mundial.

La respuesta efectiva de MSC Cruceros a los desafíos de salud que enfrenta el turismo en todo el mundo, ha sido establecer los más altos estándares de seguridad con un protocolo de sanidad e higiene que ha estado en funcionamiento desde el 16 de agosto, cuando el barco MSC Grandiosa reanudó operaciones en el mediterráneo. Hasta el momento ha completado nueve viajes completes con más de 16.000 pasajeros. Esta semana se ha unido también MSC Magnifica con itinerarios más largos de 10 noches por el mediterráneo Occidental y Oriental.

El nuevo protocolo de sanidad e higiene, de hecho, ha ido siempre más allá de las directrices de las autoridades relevantes de los países donde el barco opera y ha establecido un nuevo estándar, estableciendo los test universales, en la industria de los cruceros, los viajes en general, turismo, ocio… Todos los pasajeros pasan un control de salud antes de embarcar que conlleva tres pasos: un chequeo de la temperatura, un cuestionario de salud personal y un test de antígenos de Covid-19. Además, la tripulación pasa hasta 3 controles antes de empezar a trabajar. Otros aspectos del protocolo de sanidad e higiene son: saneamiento y limpieza profunda, excursiones protegidas en “burbuja”, mascarillas y distancia social. Además de instalaciones médicas mejoradas, un chequeo diario de salud y un plan de contingencia robusto.

El protocolo ha sido diseñado por especialistas de MSC Cruceros en las áreas de servicios médicos, salud pública y saneamiento, servicios de hotelería, ventilación, otros sistemas de ingeniería de a bordo, tecnología de la información y logística. Un grupo de expertos, Blue-Ribbon Covid-19, también fue creado. Incluye un panel de profesionales internacionales altamente cualificados cuyo papel es informar y revisar el protocolo de MSC Cruceros para asegurarse que las acciones de la compañía son apropiadas, efectivas y están basadas en las mejores prácticas de ciencia y salud.

MSC Seashore también contará con la última tecnología y las mejores soluciones disponibles para reducir su huella medioambiental. Incluye, en particular, un sistema de reducción catalítica selectiva (SCR) y un sistema avanzado de tratamiento de aguas residuales (AWT), ambos de última generación. La SCR reduce las emisiones de óxido de nitrógeno en un 90% gracias a la tecnología avanzada de control de emisiones y los sistemas AWT que transforman las aguas residuales, a través de un proceso integral de purificación y filtración, en casi calidad de agua de grifo.

MSC Seashore también tendrá capacidad de conexión de tierra a barco que permite al buque conectarse a la red eléctrica local mientras está atracado, reduciendo aún más las emisiones al aire.